Leon Haslam puede sentirse afortunado de haber escapado sin lesiones graves de la fuerte caída que sufrió el domingo en Imola durante la Carrera 2 de Superbike.

El inglés, que había perdido posiciones con respecto a Jordi Torres, su compañero en el Aprilia Racing Team –Red Devils, y Michael van der Mark, se vio involucrado en un toque con el holandés, que tuvo que retirarse en la primera curva Rivazza. Momentos más tarde, el propio Haslam se estrelló en Tamburello.

"Fue una gran caída por arriba del manillar", explicó Haslam tras pasar por la Clinica Mobile para someterse a un examen médico. "Hemos tenido problemas durante toda la carrera. Me he salido de pista tres o cuatro veces y tuve un contacto con Michael. Estaba teniendo realmente problemas con la última parte de la entrada en curva”.

"Básicamente, estaba forzando demasiado y he tenido un gran, gran ‘highside’. Ha sido uno de los más grandes que he tenido, así que estoy muy contento de haber podido levantarme".

Detallando las consecuencias físicas de su aparatosa salida ‘por orejas’, Haslam continuó:

 "Me duele el pulgar (izquierdo) y tengo tres costillas fracturadas, pero no hay nada realmente desplazado o gravemente roto. Las costillas me duelen pero por lo demás estoy bien. Estaba sin aliento sobre la grava, voy a sentirme dolorido durante algunos días, pero tenemos dos semanas de descanso antes de Donington y debería ser suficiente"

Después de la carrera en Imola, Haslam sigue siendo segundo en la clasificación general, pero ahora está a 87 puntos de Jonathan Rea (Kawasaki Racing Team), mientras que antes del evento italiano la diferencia era de 50 puntos.